El adverbio es un modificador directo del verbo:
- Estudio mucho para mis exámenes.
- Ella llegará tarde.
- Nos quedamos de ver enfrente.
El adverbio también es un modificador directo del adjetivo:
- El esfuerzo fue bastante agotador.
- Leyó un libro muy interesante.
- Mi tía nunca cocina.
En otros casos, los adverbios modifican a otros adverbios:
- Ella llega demasiado tarde.
- Hizo su trabajo muy bien.
- Nos vimos bastante temprano.
Los adverbios son palabras invariables, no admiten morfemas gramaticales. Pero admiten los derivativos:
-mente: difícilmente, fácilmente, amablemente, lentamente, igualmente, sinceramente, cruelmente, silenciosamente.
-ito, -illo: despacito, tempranito.
-ísimo: muchísimo.