Los morfemas pueden clasificarse como:
- Morfemas dependientes
- Morfemas independientes
Morfemas dependientes
Son los que se unen al lexema para formar una sola palabra. Estos se clasifican en:
- Morfemas léxicos o morfemas afijos o morfemas derivativos
- Morfemas gramaticales o flexivos
Morfemas léxicos o morfemas afijos o morfemas derivativos
Se unen al lexema para matizar el sentido de una palabra en relación a su tamaño o cualidad. Dada su posición en la palabra se clasifican en:
- Prefijos
- Sufijos
- Interfijos o infijos
Prefijos
Se anteponen al lexema: geo-grafía, in-útil, contra-poner, sub-marino, re-vestir, pre-ver, hiper-tenso,
Sufijos
Aparecen después del lexema: viej-ita, pan-era, pin-ar, madre-cita, cas-ona, carnic-ero, cas-sucha.
Interfijos o infijos
Aparecen después del lexema pero se anteponen al sufijo: pan-ad-ero, ama-bili-dad, cafe-c-ito, carn-ic-ero.
Morfemas gramaticales o flexivos
Añaden rasgos gramaticales o morfológicos influyendo en el significado de la palabra según:
- Género (masculino o femenino): niñ-o, niñ-a.
- Número (singular y plural): niñ-o, niñ-os.
- Tiempo (presente pasado y futuro): cant-aré, cant-aba.
- Modo (indicativo subjuntivo): cant-amos, cant-aban.
Morfemas independientes
Guardan independencia del lexema, forman palabras independientes pero necesitan de otras palabras. Se trata de:
- Pronombres: toma-lo, di-le.
- Preposiciones: a, con, contra,…
- Conjunciones: y, o, e, pero.
- Artículos: el, ella, un, una.